El Komondor es uno de los más importantes exponentes, sino el más, de la familia de los perros pastores. Es importante tener en cuenta que siempre ha sido una raza de trabajo, utilizada para diversas funciones y como tal, el komondor, siempre fué un excelente conductor del rebaño pero a su vez con un agudo sentido de la vigilancia y defensa del mismo, pudiendo atacar al lobo o coyote con gran decisión por lo que el komondor también es un excelente guardián y defensor de las propiedades y personas de la familia. Algunos comparan la capacidad para el trabajo y la guardia del komondor con la ductilidad del ovejero alemán pudiendo ser al igual que éste un muy buen perro de compañía. Los perros de raza komondor habitualmente son animales bastante equilibrados, seguros de si mismos, tranquilos y no muy ladradores, pero sumamente alertas ante la presencia de intrusos. Tanto es así que un komondor correctamente socializado y jerarquizado dentro de la familia aceptará fácilmente la presencia de extraños que sean aceptados por su dueño, generalmente será bastante reservado con éstos pudiéndose mantener tranquilo pero alerta. Si bien suele ser afectuoso con todos los miembros de la misma también suele tener una mayor dependencia y compenetración con quien él considera su dueño. En general los ejemplares de esta raza suelen ser bastante tolerantes con los niños ya que habitualmente no son perros fácilmente irritables. Si bien detrás de su apariencia imponente pueden ser juguetones en general suelen ser compañeros tranquilos y protectores de los niños con los que conviven y demas adultos.
Autor: M.V. Claudio Gerzovich Lis
Comportamiento animal
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